Una de las tantas razones en nuestra vida es sin duda vivir en plenitud, felices y disfrutar lo mejor que la vida nos ofrece. Sentir satisfacción en todo sentido es importante e impacta enormemente la calidad de vida y nuestra salud.
Dedicar tiempo a nutrir la mente y el espíritu no es un lujo, sino una necesidad para mantener la paz interior!!
Especialmente en esta época donde cada día parece ser mas difícil encontrar ese balance debido a las exigencias propias y sociales a las que a veces innecesariamente nos sometemos, exigiéndonos mas y mas al punto de estresarnos, perder el balance y caer en un circulo vicioso de negatividad. Perder el control de las emociones y los pensamientos puede tener consecuencias graves. En la actualidad el estrés crónico es una de esas consecuencias, la cual afecta la funcionalidad de muchas personas que lamentablemente se someten a tratamientos farmacológicos que no hacen si no enriquecer la industria y convertir a las personas en dependientes de medicamentos, que estimulan el sentimiento de bienestar de manera temporal y artificial. Teniendo como consecuencia bloquear funciones biológicas naturales, intoxicar el organismo y afectar el sistema inmunológico, cardiovascular y nervioso central.
El equilibrio mental suele depender de las emociones, las cuales dependen a su vez de factores internos y externos a los que se esta expuesto. Por instancia, a nadie le gusta sentir tristeza o desanimo, no elegimos el sentimiento pero si se puede elegir la reacción de como afrontarlo (pensamiento optimista o pesimista) y es aquí donde depende en gran parte de nosotros mismos buscar ese balance de no dejar que las emociones negativas ganen terreno.
Aprender a escuchar el yo interior de manera consiente, es una herramienta que puede ser aprovechada positivamente para reconocer tus deseos y anhelos, que al final son los que te pueden motivar e influenciar a actuar de manera positiva o negativa.